Martes es una palabra que desciende del nombre del planeta Marte, que en la Edad Media lo llamaban "el pequeño maléfico" y que significa voluntad, energía, tensión y agresividad. Marte, según la mitología romana, es el Dios de la guerra, por lo cual el día martes está regido por el planeta rojo, el de la destrucción, la sangre y la violencia. Además, la leyenda dice que un día martes 13 se produjo la confusión de lenguas en la Torrre de Babel.
Por su lado el número trece desde la antigüedad fue considerado como de mal augurio ya que en la Ultima Cena de Jesucristo, trece fueron los comensales; la Cábala enumera a 13 espíritus malignos, al igual que las leyendas nórdicas; en el Apocalipsis, su capítulo 13 corresponde al anticristo y a la bestia. En el Tarot, este número hace referencia a la muerte.
En las culturas de España, Grecia y los países de Latinoamérica, el martes 13 es considerado un día de mala suerte. Hay mucha gente con fobia a este día, que no viaja a ningún lado por superstición.
Yo no soy nada superstisciosa; pero si el día va mal y las cosas no salen bien, siempre puedes decir que es porque estamos a martes y trece. ;-)
Yo no soy nada superstisciosa; pero si el día va mal y las cosas no salen bien, siempre puedes decir que es porque estamos a martes y trece. ;-)
Pero en el Tarot de Marsella (que según Jorodosky es el auténtico), el arcano número trece no tiene nombre... más que La Muerte, es eso, el Arcano Sin Nombre.
ResponderEliminarLo que siega el esqueleto con su guadaña es nuestro subsconsciente, arrancando toda la "mala hierba" que ha crecido en él... arranca todo aquello de lo que debemos desprendernos para cambiar e ir a otro sitio... la muerte es renacimiento... es una crisis, sí,pero sin crisis no hay cambio.
Quiero decir, que no me parece tan negativo el trece, después de todo.
"Lo que siega el esqueleto con su guadaña es nuestro subsconsciente, arrancando toda la "mala hierba" que ha crecido en él... arranca todo aquello de lo que debemos desprendernos para cambiar e ir a otro sitio... "
ResponderEliminarPues creo que a veces una limpieza de subscosnciente vendría bien. Más que nada para que el mal rollito no prolifere y dejar que las buenas intenciones fluyan. Pero claro, si el precio que hay que pagar es "morirse", buenos estamos como estamos :)))