Imagen tomada de Internet
La propuesta que Mónica nos hace esta semana, consiste en escoger un personaje, un lugar y un conflicto entre una batería de seis personajes, seis lugares y seis conflictos. Yo he elegido: oficial retirado, casona abandonada, difícil decisión.
Pablo Olmo acudió a la casona abandonada por última vez. Pero eso él aún no lo sabía. Como cada viernes, había quedado con la cuadrilla para jugar al truque, y esa noche tenía muchas ganas de revancha. La semana anterior había perdido unos buenos cuartos y quería desquitarse, recuperar lo perdido y desplumar a sus contrincantes.
Jugaron dos partidas y ganó ambas. Envalentonado por el vino y viéndose en racha se atrevió con los siguiente:
-Me juego mi hacienda contra los tres- dijo, un poco fanfarrón
Los compañeros, tocados como estaban y ante la desfachatez del oficial retirado, no dudaron en coger el guante.
-De acuerdo. A una partida- respondieron los tres y con un choque de manos cerraron la apuesta.
No le vino buena mano a Pablo Olmo, y la suerte que hasta entonces estuvo de su parte, lo abandonó sin más. Perdió.
Y ahora, ¿qué? -pensaba- Si entrego mi casa y mis tierras, dejo a mi familia en la miseria, sin que ellos tengan culpa de mi irresponsabilidad. Si desaparezco, nadie les podrá reclamar nada, puesto que ellos no se han jugado nada. Pero, ¿dónde voy a ir?. Yo no puedo estar sin ellos, sin mi amada esposa, mis queridos hijos y nietos...¡como he podido ser tan ingenuo y osado!
Difícil decisión. Si se quedaba, condenaría a su familia al desahucio; pero al menos estarían todos juntos. Si se marchaba salvaría a su familia y se condenaría a sí mismo al destierro y a la soledad.
- Tengo que salir fuera a orinar - dijo a los ganadores - vuelvo enseguida.
Pablo Olmo salió de la casona abandonada un sábado de madrugada y nunca más se supo de él.